Sentarse en W se ve así: El niño se sienta sobre sus nalgas con las piernas dobladas en sus rodillas y extendidas hacia los lados. Si te paras y lo miras, sus piernas se ven en forma de “W”. Los niños pequeños se ven perfectamente cómodos y contentos de estar sentados así, entonces ¿por qué debes desalentarlo? Resulta que sentarse en W puede tener algunas consecuencias importantes en el desarrollo.
¿Por qué desincentivar la costumbre de sentarse en W?
Si sentarse en W se convierte en la posición preferida de tu niño, esto puede interferir en su desarrollo en algunas áreas claves que incluyen:
- Control de postura – Los niños requieren control postural para dominar las habilidades de motricidad gruesa y fina. Además de estabilizar los movimientos corporales grandes, el control postural proporciona una base sólida para los movimientos refinados de las manos, dedos y ojos. Sin un buen control postural, es difícil para los niños alimentarse, colorear, usar tijeras, aprender a leer, etc. Sentarse en W proporciona un apoyo tan amplio para el niño que su cuerpo no necesita usar sus músculos centrales para mantenerse erguido. Con el tiempo esto lleva a unos músculos centrales débiles y un control postural deficiente.
- Coordinación bilateral – Cruzar la línea media con los brazos a lo largo del cuerpo es fundamental para aprender cómo usar ambos lados del cuerpo de diferentes maneras al mismo tiempo. Debido a que la posición de sentarse en W le da una base tan ancha con las piernas, es más difícil para el niño rotar el tronco y realizar movimientos cruzados. Esto también puede interferir en el desarrollo de la mano dominante, porque el niño puede usar ambas manos por igual en la posición W, en vez de cruzar la línea media para usar una mano preferida.
- Balance – Una de las formas en que los niños aprenden a equilibrar su cuerpo es cambiando de peso mientras están sentados. Sentarse en W requiere poco cambio de peso porque mantiene el cuerpo en una posición estable.
- Desarrollo ortopédico – Sentarse en W genera un estrés antinatural sobre el crecimiento de las caderas, piernas y talones del niño y puede causar problemas ortopédicos. Sentarse en W es especialmente problemático para los niños con problemas ortopédicos existentes.
¿Cómo fomentar otras posiciones para sentarse?
Para prevenir el hábito de sentarse en W, cuando lo veas sentado así redirige a tu pequeño a una posición mas favorable para el desarrollo. A continuación, te presentamos algunas alternativas a la posición W que puedes enseñarle a tu pequeño.
- Piernas cruzadas – Rodillas dobladas, las piernas cruzadas al frente del cuerpo y los pies debajo de las piernas.
- Piernas al frente – Piernas rectas y paralelas entre sí, sobresaliendo frente del cuerpo.
- Piernas hacia un lado – Rodillas dobladas, las dos piernas hacia un lado del cuerpo. Fomenta que se siente hacia los dos lados para promover un desarrollo uniforme de los dos lados del cuerpo.
- Sentarse en un pequeño banco o usar sillas y mesas apropiadas para niños pequeños – Esta opción es especialmente útil para los niños con una preferencia fuerte a sentarse en la posición W.
Si tu pequeño persiste en seguir sentándose en W a pesar de tu esfuerzo para desalentarlo, o si la posición W coincide con una torpeza constante, desarrollo de cojera, debilidad muscular o atraso en el cumplimiento de logros de motricidad gruesa o fina, consulta con tu pediatra o con un terapista pediátrico ocupacional o físico para que te oriente.